¿Cuál es la forma correcta de bañar a mi bebé?
El primer baño de tu bebito es, sin duda, una de las experiencias que más atesorarás, ya que es una gran oportunidad para comenzar a crear vínculos con él; sin embargo, este paso suele estar lleno de dudas, preguntas y en algunas ocasiones miedos.
Pero no te preocupes, con las siguientes recomendaciones tendrás la mejor experiencia y recuerdos.
¿QUÉ NECESITO?
- Una bañera o una tina de plástico pequeña con una mesa para que te quede a una altura cómoda. También puedes usar tu cama protegiéndola con toallas.
- Una esponja, una toalla de manos y un trapito que puedas mojar.
- Un cepillo suave.
- Una jicarita.
- Toalla de bebé con gorrito.
- El shampoo-jabón para bebé de tu preferencia.
- Crema para bebé (opcional).
- Si hace frío, un calentador.
¿CÓMO LO HAGO?
- Tu bebé necesita un baño, una o dos veces a la semana.
- La temperatura ideal del cuarto es de mínimo 23 o 24 grados.
- Fíjate que la temperatura del agua esté tibia, no caliente, para tu codo (pues tiene piel más sensible que tu mano).
- Llena la tina con agua suficiente para cubrir a tu bebé y que no le dé frío.
- Coloca todo lo que vayas a necesitar a la mano para no tener que mover a tu bebé si te hizo falta algo. Nunca lo dejes solo en la tina.
PASO A PASO…
- Aunque nunca lo vas a soltar, puedes colocar una toalla de manos como base para que no se resbale en la tina.
- Sujétale un bracito mientras le apoyas la cabecita en tu antebrazo.
- Lava su carita y ojos solo pasándole un trapito con agua, no jabón.
- Ponle un poco de jabón al agua y talla su cabecita mientras la mojas y le haces un ligero masaje a su cuero cabelludo con el cepillo (te ayudará a evitar la formación de costra láctea).
- Por último, lava su cuerpo con la esponja y agua jabonosa.
- Envuélvelo en su toallita y sécalo bien (poniendo atención en los pliegues).
- Los bebés no necesitan crema a esta edad a menos que tengan piel reseca, pero puedes ponerle si lo prefieres.
- Vístelo rápidamente para que no tenga frío.
Otras dudas…
En un recién nacido, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, lo ideal es bañarlo hasta 24 horas después de su nacimiento. Posteriormente, dos o tres baños a la semana serán más que suficientes durante el primer año.